sábado, 4 de octubre de 2014

Wind Cube, la energía eólica en la fachada de cualquier casa - Sistema modulable






El sistema se basaría en distintos paneles modulables y anclables entre sí que conformarían una especie de panal de abeja interconectado, lo que  le dotaría de firmeza en sus sujecciones a la superficie.

viernes, 12 de septiembre de 2014

Edificios sustentables: menos costos y mayores beneficios


Un edificio sustentable puede traer grandes beneficios a las empresas, como reducir costos, maximizar ganancias y mejorar la productividad de los empleados. Además de apostar al cuidado del ambiente, sumándose así a una tendencia mundial.

Por: Matías Ortega




Hablar de edificios sustentables es hablar de eficiencia, sintetiza en diálogo con Ámbito Biz Eduardo Spósito, presidente de Argentina Green Building Council (AGBC), una ONG sin fines de lucro creada en 2007, cuya misión es facilitar y promover el diseño y construcción de este tipo de inmuebles, que opera bajo licencia del World Green Building Council.Un edificio sustentable es aquel cuyo diseño -incluyendo sus métodos constructivos- reduce de manera significativa el impacto negativo sobre la naturaleza y las personas. Se basa en la incorporación de aspectos vinculados con el consumo racional de energía y agua; el cuidado del aire interno y externo; la selección de materiales; y su ubicación, entre otros puntos.

Existe también la posibilidad de reacondicionar antiguas estructuras para que tengan parámetros de sustentabilidad. Es el caso del edificio Contact Center Personal Green, que el Grupo Telecom posee en la ciudad de Rosario, el primero de su estilo certificado en América Latina.Para la certificación de estas edificaciones en la Argentina se utiliza el sistema LEED (Leadership in Energy and Environmental Design), elaborado por la United States Green Building Council. Por el desempeño alcanzado en cada punto y teniendo en cuenta distintas categorías, se obtienen grados de valuación: Certified, Silver, Gold y Platinum.Según los datos suministrados por AGBC, en la Argentina hay en la actualidad 15 edificios certificados y 64 en proceso de hacerlo. Casi el 70% de ellos se encuentra en la Capital Federal. Uno de los principales sectores donde se registra esta tendencia es en el bancario, donde muchos están construyendo sedes corporativas en edificios sustentables.

Pero la opción de trabajar en estos edificios no tiene que ver sólo con una cuestión ecológica. Gracias a las distintas estrategias para una utilización más eficiente de los recursos, el consumo de energía eléctrica puede disminuir hasta un 30%, y hasta un 40% el de agua si se utilizan las aguas grises para tareas donde no se requiere que sea potable. Así, se reducen sustancialmente los costos operativos y de mantenimiento. Especialistas consultados coinciden en que con una política de tarifas de servicios similar a la de otros países -donde son más elevadas- los beneficios serían aún más evidentes.

Es mucho más que hacer un edificio verde. Son edificios bien operados, que tienen una eficiente utilización de la energía y racionalidad en el uso de los recursos, insiste Spósito.

La mayoría de las empresas por una cuestión de responsabilidad social y de eficiencia de la operatoria y el mantenimiento tratan de tener edificios o algo que tenga que ver con lo sustentable. Incluso hay empresas que pagan un diferencial en el alquiler (quizá de hasta un 10% más) para estar en este tipo de edificios, asegura Spósito.

Por su parte, el ingeniero Carlos Grinberg, coordinador general del estudio que lleva su apellido y también miembro de AGBC, señala: La disyuntiva que enfrentamos es que necesitamos construir y tenemos el problema del deterioro de nuestro mundo. Los pseudo ambientalistas que dicen cuidar la naturaleza plantean que no hay que edificar más. Nuestra opción es cambiar la forma de construir, sustentable y cuidando el ambiente.

Grinberg reafirma que los costos de operación de estos edificios son claramente inferiores a los de los tradicionales, y justifica así en que año tras año crece el número de empresas que deciden trabajar en ellos. Es un proceso lento de aprendizaje, pero cada vez son más los que se suman, sostiene.

Además, tiene otro importante beneficio: la mejora en la calidad de las condiciones laborales. Estudios realizados sobre este aspecto aseguran que las personas que trabajan en edificaciones sustentables sufren menos enfermedades -lo que disminuye los índices de ausentismo- y en general incrementan su productividad.

Los edificios sustentables permiten a las empresas reducir los costos operativos y mejorar la productividad de los empleados. Además, ayuda a relacionarse con un concepto que tiene una valoración muy positiva y contribuye a mejorar el posicionamiento de la marca. Los consumidores valoran cada vez más a las compañías que tienen conciencia ambiental y ecológica, opina Pablo Kiesel, gerente comercial de Raghsa, empresa con más de 40 años de experiencia en bienes raíces.

Asimismo, sostiene que una persona que trabaja en condiciones adecuadas de iluminación incrementa un 15% su capacidad de respuesta y comete un 20% menos errores que una que ocupa un ambiente con luz deficiente. Un empleado que trabaja en un ambiente cuidado se encuentra satisfecho y aumenta considerablemente su productividad, agrega.

Raghsa es responsable de varios desarrollos de este tipo, entre los que se destaca el complejo Madero Office, una torre de 140 metros ubicada en Puerto Madero, que obtuvo en 2011 la certificación LEED Core and Shell (Núcleo y Caparazón) en el nivel Silver. Es el edificio sustentable más grande del país.

En la Argentina existen programas de promoción, aunque es poca la legislación. En la Ciudad de Buenos Aires rige la Ley 4428 que prevé rebajas de hasta un 20% de descuento en el ABL que se paga por los espacios comunes -no por los departamentos- a aquellos edificios que construyan terrazas verdes. Se trata de colocar en azoteas pasto y plantas, lo que trae beneficios tanto para el inmueble como para el resto de la sociedad: mejoran el rendimiento térmico de los edificios, prolongan la vida útil de los techos, reducen el nivel de dióxido de carbono, contribuyen a disminuir la temperatura de la ciudad, y absorben agua de lluvia, con lo que ayudan a evitar inundaciones. Aunque no está demasiado extendido, en otros países se implementan exenciones impositivas o bonificaciones en créditos para este tipo de construcciones.

FUENTE: www.argentinagbc.org.ar

viernes, 5 de septiembre de 2014

Los bebés de barrios con zonas verdes nacen con más peso


Un estudio realizado en Canadá comprueba que los efectos en los niños son también psicológicos y sociales

Las madres que viven en barrios con un montón de césped, árboles u otra vegetación son más propensas a dar a luz a término y sus bebés nacen con pesos mayores, en comparación con las madres que viven en zonas urbanas que no son tan verdes, según un nuevo estudio realizado en Canadá.

                              


Las madres que viven en barrios con un montón de césped, árboles u otra vegetación son más propensas a dar a luz a término y sus bebés nacen con pesos mayores, en comparación con las madres que viven en zonas urbanas que no son tan verdes, según un nuevo estudio. 

Los resultados se mantienen incluso cuando se ajustan por factores como los ingresos del barrio, la exposición a la contaminación del aire, el ruido, y la transitabilidad del barrio, según los investigadores de la Universidad Estatal de Oregón (EE.UU.) y de la Universidad de la Columbia Británica (Canadá). 

"Esto fue una sorpresa", reconoce Perry Hystad, epidemiólogo ambiental en la Facultad de Salud Pública y Ciencias Humanas de la Universidad Estatal de Oregón, y autor principal del estudio. "Esperábamos que la vinculación entre los datos de verdor y de nacimiento desaparecieran una vez que tuviéramos en cuenta otras exposiciones ambientales, como la contaminación atmosférica y acústica. La investigación sugiere que el verdor afecta al nacimiento de otras maneras, como psicológica o socialmente", señala en la nota de prensa de la universidad. 

Los investigadores no están seguros aún de dónde está el vínculo entre el verdor y el nacimiento. Se necesitan más estudios para determinar si más espacios verdes proporcionan más oportunidades sociales y mejoran el sentido de pertenencia a la comunidad de una persona, o si tienen un efecto psicológico, reduciendo el estrés y la depresión, explica Hystad. 

En un estudio de más de 64.000 nacimientos en el área de Vancouver (Columbia Británica, Canadá), entre 1999 y 2002, los investigadores encontraron que había un 20% menos de nacimientos muy prematuros y un 13% menos de nacimientos algo prematuros entre los bebés cuyas madres vivían en los barrios más verdes. 

También descubrieron que menos niños de los barrios más verdes eran considerados pequeños para su edad gestacional. Los bebés de los barrios más verdes pesaban 45 gramos más al nacer que los bebés de barrios menos verdes, apunta Hystad, profesor asistente de salud y seguridad ambiental y ocupacional. 

El estudio podría tener consecuencias significativas para la salud pública, añade. "Desde un punto de vista médico, son pequeños cambios en el peso al nacer, pero a lo largo de una gran población, son diferencias sustanciales que tendrían un impacto significativo en la salud de los recién nacidos en una comunidad". 

Los bebés que nacen temprano o con bajo peso a menudo tienen más problemas de salud y de desarrollo, no sólo en el nacimiento, sino también a medida que continúan creciendo, y el coste de cuidarlos puede ser mucho mayor. 

El estudio también es parte de un creciente cuerpo de trabajo académico que indica que el espacio verde tiene una influencia positiva en la salud. 

Dado que la mitad de la población mundial vive en zonas urbanas, es importante entender cómo los diferentes aspectos del entorno construido - los edificios, parques y otros espacios creados por el hombre en los que vivimos- pueden afectar la salud, afirman los investigadores. 

"Sabemos mucho acerca de las influencias negativas, como las de vivir cerca de las carreteras principales, pero demostrar que una opción de diseño puede tener beneficios es muy edificante", señala Michael Brauer, otro investigador. ç 

"La modificación de las características del diseño urbano, por ejemplo aumentando los espacios verdes, puede llegar a ser una estrategia muy rentable para prevenir las enfermedades, al tiempo que también proporciona beneficios ecológicos." 

No está claro cuánto o qué tipo de espacio verde da mayor beneficio a los bebés en desarrollo, pero los investigadores sí que saben que poner una jardinera en el patio o un árbol en la acera probablemente no marcaría diferencias significativas en los partos. 

"Plantar un árbol probablemente no ayudaría", cree Hystad. "Hay que alcanzar un cierto umbral de verdor para que se noten los efectos beneficiosos". Uno de los próximos pasos es entender mejor cuál es ese umbral y por qué marca la diferencia. Los resultados del estudio fueron publicados recientemente en la revista Environmental Health Perspectives.

Referencia bibliográfica: 

Perry Hystad, Hugh W. Davies, Lawrence Frank, Josh Van Loon, Ulrike Gehring, Lillian Tamburic, Michael Brauer: Residential Greenness and Birth Outcomes: Evaluating the Influence of Spatially Correlated Built-Environment Factors. Environmental Health Perspectives (2014). DOI: 10.1289/ehp.1308049.

FUENTE: www.tendencias21.net

domingo, 24 de agosto de 2014

Argentina premia utilizar energías renovables en la construcción de obra nueva


Legisladores del Frente para la Victoria proyectan gracias a un Plan de Ley una batería de acciones con el objetivo de fomentar a los consumidores y a las empresas de la construcción para que sean capaces de crear y viviendas ecológicamente sostenibles, a partir del uso exclusivo de fuentes de energía renovables, mucho más eficientes y económicas.




Su impulsora, la Diputada Nacional María Emilia Soria, ha basado esta iniciativa afirmando que la energía es la más importante de la sociedad y una pieza fundamental en el desarrollo de económico del país. Sin embargo, reconoce que el aumento del consumo dado por el crecimiento de la actividad económica, por la llegada de redes eléctricas y por el acceso al gas natural en lugares donde antes no la existía, ha generado la crisis del sector.

“Es en este contexto, es donde nos encontramos en la obligación de repotenciar las fuentes de energía renovable, que fueron consideradas inicialmente como menos accesibles técnica y económicamente”, ha comentado Emilia Soria.

Soria afirma que “este proyecto, que tiene por objeto incorporar energías renovables en construcciones destinadas a viviendas únicas familiares, tanto urbanas como rurales, es el puntapié inicial para colocar al ciudadano frente a la problemática del consumo energético. Además se le presenta una alternativa interesante desde el punto de vista financiero para incentivar su utilización”.

En el artículo 6°, se detallan las políticas que deberá llevar a cabo el Poder Ejecutivo a través de la autoridad de aplicación. La idea es generar un nuevo paradigma energético, donde se fomente el ahorro y la eficiencia mediante la creación de un Plan Nacional para la Construcción y Adaptación de Hogares Sustentables de acuerdo a las necesidades de la población.

La ley 26.190 que instituyó el Régimen de Fomento Nacional para el uso de Fuentes renovables de energía destinada a la producción de energía eléctrica, impuso como objetivo de dicho régimen lograr una contribución de las fuentes de energía renovables hasta alcanzar el 8 por ciento del consumo de energía eléctrica nacional. “Este proyecto se suma a aquella normativa con el fin de reducir el consumo de energía eléctrica de fuentes convencionales”, remarca.

“El ahorro y la mejora de la eficiencia del sistema, una mejor y más solidaria distribución de la energía final y, en cualquier caso, la progresiva sustitución de las fuentes de energía convencionales (agotables y contaminantes), por fuentes de energía renovables son componentes ineludibles de este proceso de cambio del sistema energético de nuestro país”, sostuvo finalmente Soria.

Fuente original: http://www.noticiasambientales.com.ar/

martes, 29 de julio de 2014

Los Árboles Pueden Salvar Muchas Vidas en Entornos Urbanos


Un estudio realizado en EEUU ha revelado que solo en ese país ahorran más de 850 muertes al año



En un estudio a gran escala, científicos del Servicio Forestal de Estados Unidos han calculado que los árboles ahorran más de 850 vidas humanas al año y evitan 670.000 incidencias de síntomas respiratorios agudos. Además, el beneficio es mayor en las zonas urbanas, aunque la densidad de árboles sea mayor en las rurales.

En la primera estimación a gran escala de la eliminación de la contaminación del aire que realizan los árboles en Estados Unidos, científicos y colaboradores del Servicio Forestal del país calcularon que los árboles ahorran más de 850 vidas humanas al año y evitan 670.000 incidencias de síntomas respiratorios agudos. 

Aunque la eliminación de la contaminación de árboles equivale a una mejora promedio de la calidad del aire de menos del 1 por ciento, los impactos de esa mejora son sustanciales. Los investigadores valoraron los efectos en la salud humana de la reducción de la contaminación del aire en casi 7.000 millones de dólares cada año, en un estudio publicado recientemente en la revista Environmental Pollution. 

El estudio es único, ya que vincula directamente la eliminación de la contaminación del aire con la mejora de los efectos en la salud humana y los valores de salud asociados. Los científicos descubrieron que la eliminación de la contaminación es mucho mayor en las zonas rurales que en las urbanas, sin embargo los efectos en la salud humana son mucho mayores en las zonas urbanas que en las rurales. 

"Con más de un 80 por ciento de los estadounidenses viviendo en áreas urbanas, esta investigación pone de relieve cuán verdaderamente esenciales son los bosques urbanos son para la gente en todo el país", explcia Michael T. Rains, director de la Estación de Investigación del Norte del Servicio Forestal, en la nota de prensa del Departamento de Agricultura de Estados Unidos. 

Contaminantes 


El estudio tiene en cuenta cuatro contaminantes para los que los EE.UU. ha establecido normas de calidad del aire: dióxido de nitrógeno, ozono, dióxido de azufre y partículas menores a 2.5 micras (PM2.5) de diámetro aerodinámico. Los efectos sobre la salud relacionados con la contaminación del aire incluyen los impactos sobre los sistemas pulmonar, cardiaco, vascular, y neurológico. En Estados Unidos, en 2005, aproximadamente 130.000 muertes relacionadas con las PM2.5, y 4.700 muertes relacionadas con el ozono se atribuyeron a la contaminación del aire. 

Los beneficios de los árboles varían según la cobertura de los árboles en todo el país. La cobertura arbórea en los Estados Unidos se estima en el 34,2 por ciento, pero varía de un 2,6 por ciento en Dakota del Norte a un 88,9 por ciento en new Hampshire. 

"En términos de impacto en la salud humana, los árboles en las zonas urbanas son mucho más importantes que los árboles rurales debido a su proximidad a la gente", explica Nowak. "Hemos encontrado que, en general, cuanto mayor sea la cobertura de árboles, mayor será la eliminación de la contaminación, y cuanto mayor la densidad de población, mayor es el valor de los beneficios para la salud humana."

domingo, 1 de junio de 2014

Sensores en el smartphone para hacer un mapa de la contaminación


Científicos alemanes desarrollan un sistema que permitirá medir la polución de polvo fino de forma colaborativa

Científicos alemanes están desarrollando un sensor que se podrá conectar a los 'smartphones', y que permitirá medir la contaminación de polvo fino. De ese modo, con la colaboración de los usuarios de a pie, se podrá crear un mapa muy preciso de la polución en todos los lugares. El sistema funciona haciendo fotografías con luz en determinadas frecuencias, y midiendo la dispersión provocada por el polvo o el humo. Por Carlos Gómez Abajo.


Cualquier usuario de 'smartphone' podrá colaborar en un mapa de contaminación. 
Imagen: Patrick Langer. Fuente: KIT.

Fotos de Pekín y, más recientemente, de París, ilustran claramente el alcance de la contaminación de polvo fino en las grandes ciudades. Pero ¿qué pasa con nuestro entorno directo? ¿Cuál es la concentración de contaminación cerca de nuestra ruta para correr favorita? 

Los científicos del Instituto de Tecnología de Karlsruhe (KIT), de Alemania, están desarrollando un sensor que se puede conectar fácilmente a los teléfonos inteligentes. En el futuro, sus usuarios participarán en la elaboración de un mapa de la contaminación mediante la detección participativa. La precisión del mapa será más alta cuanta más gente participe. 

El principio de las mediciones de polvo fino utilizando un teléfono inteligente es el de los sensores ópticos simples. "En lugar de la luz LED convencional por infrarrojo de los sensores, la linterna del smartphone emite luz en la zona de medición. Esta luz es dispersada por el polvo o el humo que pueda existir. La cámara sirve como un receptor y toma una imagen que representa el resultado de la medición. El brillo de los píxeles se puede convertir después en la concentración de polvo", explica el científico computacional Matthias Budde, que ha desarrollado el sistema, en la nota de prensa de KIT. 

Los científicos han llevado a cabo mediciones comparativas para demostrar que el principio funciona. Los sensores de teléfonos inteligentes aún no son tan precisos como los instrumentos especializados. Sin embargo, sus costes son mucho más bajos. "Los detectores en las estaciones de medición oficiales son muy precisos, pero también muy grandes, muy caros, y estáticos. En Karlsruhe, por ejemplo, sólo hay dos estaciones de medición", recuerda Budde. 

Su plan es mejorar la precisión mediante una alta densidad de medición. Las mediciones realizadas con muchos sensores, adyacentes entre sí, pueden combinarse entre sí para conseguir resultados con una menor imprecisión. Debido a su gran proximidad, los sensores también pueden ser calibrados unos respecto a otros. 

Imán 

Se prevé que el sensor se conecte al teléfono inteligente por medio de un imán, por ejemplo. No hará falta adaptar la electrónica. Los usuarios que quieran unirse a la colaboración tendrán que descargar la aplicación correspondiente. En el punto de medición deseado, el sensor estará conectado al teléfono móvil y los usuarios tomarán una foto o un vídeo para la medición. 

Las imágenes pueden ser evaluadas localmente o transmitidas a un sistema informático que combina los datos con otras mediciones y los envía de vuelta. El dato de concentración de polvo fino aparece entonces en el teléfono. 

En la actualidad, el sensor puede medir concentraciones de aproximadamente un microgramo por metro cúbico. Esto es suficiente para la detección de polvo grueso y humo, pero no para las concentraciones de polvo finos típicas, en el rango de los microgramos. 

Los científicos planean ahora aumentar aún más la sensibilidad de los sensores. Esto se puede lograr, entre otros modos, mediante el uso de lentes hemisféricas. Esto lo han aplicado los científicos de KIT en un segundo prototipo mucho más pequeño. Además, se seguirán desarrollando los algoritmos de evaluación y los propios smartphones.

En el futuro, los dispositivos ya no comprimirán las fotos de forma automática, sino que también serán capaces de suministrar los datos en bruto. Esto promete aumentar aún más la precisión de los resultados de la medición. Budde calcula que un sensor de teléfonos inteligentes capaz de detectar el polvo típico fino será desarrollado en el transcurso del próximo año. 

La tesis doctoral del científico, sin embargo, no sólo se ocupa de un mayor desarrollo del sensor y de las posibilidades de generar un mapa de contaminación, sino también de la cuestión de cómo motivar a los ciudadanos a que participen. "Muchas personas están intrínsecamente interesadas ​​en estas ofertas, porque ven un beneficio para ellos y para los demás", dice Budde. 

Para los que disfrutan de los juegos, un sistema de gamification sería factible. Los usuarios pueden obtener puntos por la recogida de datos o mediciones en ciertos lugares. 

Además, la protección de datos es un aspecto importante. "Los usuarios tienen que estar seguros de que el operador evite que sus datos sean espiados o robados y los utilice para otra cosa que no sea el mapa de la contaminación". Una opción es la agregación de datos, gracias a la cual los datos se combinan y empaquetan de tal manera que ya no pueden ser asociados a una persona concreta. 

Bosques amenazados 

Una iniciativa reciente va en la línea de hacer mapas participativos relacionados con el medio ambiente. El Instituto de Recursos Mundiales (WRI, por sus siglas en inglés), Google, el Programa de las Naciones Unidas para el Medio Ambiente y un grupo de más de 40 socios internacionales han puesto la plataforma Global Forest Watch, que permitirá monitorizar en tiempo casi real la evolución de los bosques de todo el mundo, y prevenir y combatir su deforestación. 

Las comunidades indígenas podrán además subir alertas y fotografías cuando invadan sus tierras. También las organizaciones no gubernamentales pueden identificar puntos críticos de deforestación, movilizar la acción y reunir pruebas para que los gobiernos y las empresas se hagan responsables.

FUENTE: www.tendencias 21.net

sábado, 3 de mayo de 2014

“Se puede crecer de otra forma; con redistribución, sostenibilidad y equidad”

José Illana:  Expertos se reúnen para pensar un modelo de crecimiento alternativo al basado en el PIB, en una nueva edición de “Diálogos en la Granja”


Por Rosae Martín 

Durante los días 7 y 8 de mayo La Granja de San Ildefonso en Segovia acogerá una nueva edición de "Diálogos en la Granja". El tema a tratar es el modelo actual de crecimiento, bajo la pregunta: ¿se puede crecer sin crecer? Los expertos que participarán en este think tank expondrán alternativas a un modelo de progreso basado principalmente en el PIB de un país. Este indicador está sujeto a revisión en la actualidad, al no responder al paradigma económico, cultural y social en el que estamos inmersos. Por Rosae Martín Peña.




"Diálogos en la Granja". Fuente: http://www.dialogosenlagranja.es

El modelo de crecimiento actual tiene un tope, tanto por el lado de los recursos estratégicos como por el de la energía, el agua y el suelo, que son recursos escasos. También en la distribución y el acceso a los mismos de grupos cada vez más reducidos. 
  
Frente a este diseño de excelencia económica, que toma como base del progreso el incremento anual del PIB de un país, surgen voces discordantes desde el mundo empresarial y académico, que apuestan por una revisión de los medidores de crecimiento actuales, y abogan por otros que incluyan como prioridad valores de sostenibilidad social, empresarial y económica. 

  "Crecer sin crecer" 

En el año 1972, el Club de Roma ya planteó en "Los límites del crecimiento", que el ritmo actual de crecimiento cuantitativo del planeta no sería suficiente para cubrir las necesidades de la población mundial. 
  
José Illana, fundador de Diálogos en la Granja, y socio fundador de Quiero salvar el mundo haciendo marketing, donde empezó todo,  cuenta a Tendencias 21 como crecer sin centrarnos solamente en el PIB.

¿Desde cuándo el progreso viene medido por lo que determina el PIB de un país?

Desde que en los años 30 del pasado siglo se definió el PIB, existen serias dudas sobre si es o no un indicador válido para determinar el progreso de las sociedades. Es un valor macroeconómico, que tiene una validez determinada; no es un indicador absoluto de la riqueza total o de la actividad total de un país o una región. Y en todo caso, no incluye ni el valor monetario de muchos trabajos fundamentales para el mantenimiento de la vida (el trabajo de las personas que cuidan a sus familias, por ejemplo) ni la mayor parte de la economía sumergida. Y esto no se sabe de ahora, sino que hasta su "inventor", Simon Kuznets, ya advirtió de las propias limitaciones del indicador. 

¿Cómo se puede crecer sin que crezca necesariamente el PIB? 

Pues eso es lo que vamos a intentar determinar en Diálogos en la Granja. Lo que sí parece claro es que el modelo lineal de una economía que extrae recursos y los convierte en bienes que se venden y en un plazo cada vez más corto se tiran convirtiéndose en basura es insostenible. ¿Puede el PIB recoger la riqueza de una economía circular, en la que las cosas tengan varias "vidas"? ¿Debería recoger todas las deseconomías, todas las repercusiones negativas de un modelo productivo daniño, perjudicial, tóxico para las personas y para todos los seres vivos? A ver si por querer mantener un PIB creado en un contexto que es por completo diferente al actual, nos vamos a cargar el marco en el que desarrollamos toda nuestra vida y nuestra actividad. No world, no business. El paradigma está cambiando, y quizá los indicadores deban cambiar con él. 

¿Por qué actualmente el interés de gobiernos y países se centra en el factor del crecimiento y no en cómo se crece? 

Bueno, algo está cambiando. Nosotros queremos contribuir a esa reflexión con Diálogos en la Granja. Creemos que podemos aportar algo de valor al proceso en el que estamos todos metidos. Se puede crecer de otra forma. Quizá haya que incluir en los indicadores elementos de redistribución, de sostenibilidad, de equidad. Pero los gobiernos son personas a las que se elige cada equis años, y saben que el PIB tal como está ahora definido está más o menos relacionado con el empleo. Y eso tiene su importancia a la hora de ser reelegido, por ejemplo. Eso un político no lo va a perder de vista porque para él el PIB es un indicador valioso de cómo le va a ir, a él y a su partido, en el corto plazo. 

El Club de Roma ya habló de los límites del crecimiento en 1972. ¿Cuáles podrían ser las consecuencias de seguir obviando estos límites? 

Como he dicho antes, una economía lineal es insostenible porque los recursos no son infinitos, ni el planeta tiene infinita capacidad de absorber lo que con esos recursos estamos produciendo. Comprar, tirar, comprar... va bien para un modelo lineal pero es necesario otro modelo de crecimiento más sostenible. Y cuando hablo de sostenibilidad no me refiero sólo al concepto de "ecología", sino a la sostenibilidad económica de las propias empresas. El modelo está cambiando. 

¿Qué tipo de soluciones se pueden dar en un mundo limitado donde los puestos de trabajo tradicionales ya no tienen cabida y además han resultado no ser sostenibles? 
  
Quizá cuando uno está en medio de la tormenta, en medio de un cambio revolucionario, no tiene la perspectiva suficiente para definir eso claramente. Sí parece que lo que llamamos "economía digital" no genera tanto empleo como la industrial. Habrá que verlo. ¿Estamos seguros de que el trabajo, y los beneficios, están bien repartidos? 
Por otra parte, un nuevo modelo económico quizá dé lugar a nuevos empleos. Hace 20 años nadie imaginaba que tendríamos medio centenar de aplicaciones en nuestro móvil. Hay nuevas actividades y nuevos empleos. 

El concepto de progreso va ligado de algún modo al de crecimiento lineal, ¿no sería necesario también renovar el concepto de progreso y de modelo productivo? 

De eso estamos absolutamente convencidos. O cambia el modelo o vamos a tener que cambiar de planeta, y no creo que eso sea factible. 

En esta nueva edición de los Diálogos de la Granja participarán una serie de expertos que proceden del mundo de la empresa, (Francisco Hortigüela, Vincent Rosso, Félix Muñoz); de la sostenibilidad económica, social y ambiental (Teresa Ribera, Luis Miguel Barral, Helena Ancos, Natalia Pedrajas); del mundo académico (José Luis Fernández, Jordi Sevilla); y de la innovación (Carlos Mataix). 

Los diálogos se estructurarán en dos partes. La primera estará dedicada a la exploración y el diagnóstico de los retos, y de las oportunidades que plantea un mundo donde el crecimiento económico tiene que volver a ser útil para la sociedad, para las personas y para ello ha de tener en cuenta los recursos de los que dispone, el medio ambiente y la distribución de la riqueza. 

La segunda sesión, que tendrá lugar el día ocho de mayo, se dirigirá a identificar las limitaciones con que se encuentra este proceso de cambio puesto ya en marcha. 

Ahora el verbo útil es "crear" 
  
Para  Luis Miguel Barral, socio fundador de Two Much Research Studio , la frase de que  el mundo es limitado "tiene mucha miga", y añade "si pienso en el mundo-planeta como un contenedor de todas las materias nutrientes que los seres vivos necesitamos, sí tiene sentido hablar de mundo limitado. Pero creo que es una visión limitada esta del mundo limitado. La del contenedor es una metáfora que, de aceptarla sin más, nos conduce a entender la vida como una competición entre organismos que se disputan ese capital finito". 
  
Además, para Barral esta metáfora del mundo limitado estimula la ansiedad de todos los jugadores por alcanzar un cierto nivel por encima del promedio, que según sus palabras : "lo que garantiza es una diferencia positiva a favor respecto a otros jugadores (los que están por debajo). Esta visión legitima la creencia de que sobresalir aporta una mayor probabilidad de éxito en la competencia por sobrevivir". 
  
Por otro lado, la visión del fundador de Two Much es más optimista al ver a los propios seres humanos como un mundo de capacidad ilimitada, que son capaces de poner en juego su propia versión del mundo "si concebimos que el mundo además de un contenedor de nutrientes está formado por millones de seres con capacidad ilimitada de desarrollar lo que les entusiasma, entenderemos fácilmente que la estrategia más beneficiosa es aprender a detectar y a conectar con eso que nos hace únicos, y favorecer los intercambios". 
  
Miguel termina: "Visto desde esta perspectiva no tiene sentido querer formar parte de “los más...”, porque nadie puede ser más tú que tú mismo. Ya no es necesario competir, ahora el verbo útil es crear". 

Fuente: www.tendencias21.net 
  

miércoles, 19 de febrero de 2014

La geometría de los seres vivos busca la eficiencia energética


Explican en qué se parecen un árbol y un tigre, añadiendo una nueva variable a una antigua ley de la biología

A principio de los años 30 del siglo XX, el biólogo suizo Max Kleiber estableció una ley que explicaba la relación entre la forma y el funcionamiento de los seres vivos. Un equipo internacional de científicos ha añadido ahora una nueva variable a esa ley. Así han explicado como el árbol y el tigre llegaron a ser igualmente eficientes a nivel energético, en el transcurso de su evolución. 
Por Marta Lorenzo


¿Por qué el corazón de un ratón late más o menos el mismo número de veces en toda su vida que el de un elefante, a pesar de que el primero vive un año y el segundo hasta 70? ¿Por qué son tan distintos los árboles de los tigres? 

A principio de los años 30 del siglo XX, el biólogo suizo Max Kleiber‎ estableció una ley (la ley de Kleiber) que explicaba en parte la cuestión de por qué el tamaño influencia la forma y funcionamiento de los animales y del resto de seres vivos. 

La ley versa sobre la relación entre el ritmo metabólico de los seres vivos y sus masas. Dice que la tasa en que un organismo produce energía para vivir a partir de las calorías consumidas (tasa metabólica) es proporcional a la masa de su cuerpo elevada a la potencia ¾. 

Según esta ley, las formas biológicas seguirían por tanto una “pauta” para utilizar la energía de manera eficiente. Dicha pauta explicaría las diferencias entre el “funcionamiento” de los corazones del ratón y el elefante, pero también otras muchas diferencias en las formas y geometrías de las especies animales y vegetales. 

El árbol y el tigre 

Pero, aunque aceptada durante generaciones, la ley de Kleiber no ha sido nunca completamente comprendida. Para entender por qué, consideremos un árbol y un tigre. 

En términos evolutivos, el árbol “solo” tiene que convertir la luz solar en energía, dentro de una estructura más o menos estable. Para hacer esta tarea de la manera más eficiente posible, cuenta con muchas superficies, las de sus hojas; una superficie general que es casi la misma que su volumen; y un flujo de nutrientes por su interior que circula a una velocidad constante, independientemente de su tamaño. 

Si se tienen en consideración estas variables, y se calcula la relación entre la masa de las diferentes especies de árboles y sus metabolismos, el cálculo sí se ajusta a la ley de Kleiber. 

Sin embargo, en el caso del tigre, la cosa no parece tan sencilla. Para nutrir su masa, este animal necesita combustible. La quema de ese combustible, además de generar la energía necesaria, produce un exceso de calor corporal, del que el tigre debe deshacerse para no quemarse. ¿Cómo encaja esta circunstancia en dicha ley?

Científicos de la Universidad de Maryland (EEUU) y la Universidad de Padua (en Italia) han descubierto un factor que parece completar y explicar completamente la ley de Klieber para este caso. 

Se trata de una variable crucial que hasta ahora había sido pasada por alto, según explican los propios investigadores en un comunicado de la Universidad de Maryland: la velocidad a la cual los nutrientes son transportados por todo el cuerpo de los animales, calentándolo. 

Los científicos calcularon la velocidad a la que el corazón de los animales bombea sangre y descubrieron que la velocidad del flujo sanguíneo es igual a la masa de los animales elevada a la duodécima potencia. 

“Los animales necesitan ajustar el flujo de nutrientes y calor a medida que sus masas cambian, para mantener la mayor eficiencia energética posible”, señalan. “Por eso, los animales necesitan una bomba –el corazón- y los árboles no”. 

Añadiendo esta información a la ecuación, los investigadores descubrieron que habían logrado una explicación completa de la ley de Kleiber: “Una respuesta elegante es a veces la correcta. Esta respuesta es elegante porque usa argumentos geométricos muy simples”, afirma el físico Amos Maritan, también de la Universidad de Padua. 

“No hace referencia a ninguna estructura especializada. Presenta muy pocas condiciones previas. Se tienen dos linajes, plantas y animales, que son muy diferentes y han llegado a la misma conclusión. Es lo que se denomina evolución convergente, y el resultado sorprendente es que esto ha sido propiciado por física y matemáticas subyacentes”. 

Otro de los autores del estudio, el botánico de la Universidad de Maryland, Todd Cooke, explica que de esta forma: “Las geometrías de plantas y animales han evolucionado más o menos en paralelo. Los seres vivos primigenios tenían cuerpos simples y bastante distintos, pero la selección natural ha actuado en los dos grupos de tal manera que las formas de árboles y animales modernos cuenten, sorprendentemente, con una eficiencia energética equivalente”.

FUENTE: www.tendencias21.net